1.000 euros por 56 horas semanales: así son las pésimas condiciones de los obreros en el Camp Nou
"Me dijeron que me pagarían ocho euros la hora, que tenía que trabajar 10 horas al día y que firmara el contrato", comenta un obrero
Algunos de los obreros del Spotify Camp Nou han mostrado toda la verdad las obras, que siguen su curso, pero no sin evitar las polémicas. Después de haber superado varios problemas, por ejemplo, en torno a la licencia de la construcción del estadio, ahora, ha salido a la luz las pésimas condiciones de los obreros que trabajan para remodelar la que será la nueva casa de los culés. Jornadas laborales de más de 10 horas diarias, 56 horas en total a la semana y un salario que va desde los 1.000 a los 1.300 euros mensuales.
«Es muy duro, trabajas tanto si hace calor como si llueve. Cuando llegas a casa te tiemblan los pies… acabas destrozado», cuenta un obrero. «Yo tengo mucho miedo de caerme, de hacerme daño y no poder trabajar… es muy difícil, muy duro», añade otro trabajador que se dedica a desmontar piezas de hierro desde varios metros de altura. Y es que muchos de ellos entran a las ocho de la mañana y salen entre las seis y las siete de la tarde.
Han sido varios los obreros que, bajo un pseudónimo, han querido poner de manifiesto presuntos fraudes laborales en las obras de remodelación del estadio azulgrana. En concreto cinco trabajadores de cinco empresas subcontratadas en el Camp Nou que han reflejado la realidad de las obras. Trabajadores que reconocen haber firmado contrato sin saber leer ni escribir y que ahora sufren las consecuencias de ello.
El Periódico ha sido el medio que ha llevado a cabo una investigación desde que dieran comienzo las obras cinco meses atrás y los que han hablado con varios trabajadores de origen marroquí, pakistaní, boliviano y otras nacionalidades extranjeras que llegaron a Barcelona para poder llegar a fin de mes.
Algunas de estas empresas subcontratadas para aportar trabajadores a la obra del estadio son Deinoa S.L o Solrigol S.L., que acumula un importante historial de expedientes. Y es que es Limak Construction Europe S.L, una empresa turca de construcciones, a la que se le adjudicó la licitación de las obras del Camp Nou con el objetivo de finalizar las obras en un plazo de máximo tres años. Pero debajo de los otomanos aparecen otras tantas empresas.
Son estas empresas las que aportan lo que se denominan peones de obra para llevar a cabo las fases más laboriosas y que más trabajo físico requieren, especialmente en la actualidad cuando la primera fase ha sido la de demolición de los primeros anillos del estadio. Son precisamente estas subcontratas las que pagan menos de lo legalmente establecido para así poder ofrecer precios competitivos en el mercado.
«El FC Barcelona no tiene ninguna relación contractual directa con las empresas subcontratadas, sino que la relación contractual es únicamente con Limak», comentan fuentes del Barcelona al medio encargado de llevar a cabo esta investigación. No obstante, los obreros del Camp Nou tienen otras cosas que decir…
Salarios muy bajos
«Me dijeron que me pagarían ocho euros la hora, que tenía que trabajar 10 horas al día y que firmara el contrato», cuenta un obrero, empleado por Solrigol S.L. Unas condiciones que exceden el máximo exigido por la ley y que son muy similares a otros trabajadores que forman parte de otras empresas como Rinko Instalaciones S.L. y Deinoa S.L. A otro de ellos, bajo el pseudónimo de Mohamed, la empresa Servicon Terrassa S.L. le informó que su sueldo sería de 6,5 euros la hora, una cifra que está muy por debajo de lo que marca el salario mínimo interprofesional (7,82 euros la hora).
Por ley, el máximo de horas que se pueden trabajar en una jornada laboral diaria es de nueve horas, pero los testimonios recogidos afirman que trabajan incluso 10 horas al día. Por más de 55 horas semanales, los trabajadores reciben un sueldo de entre 1.000 y 1.300 euros al mes. Una jornada semanal de 56 horas, cuando legalmente no puede superar las 40 horas.
Limak se desmarca
Pero la propia constructora Limak se defiende ante El Periódico declarando que «no toleran ningún caso de irregularidad con los trabajadores. Por el momento, no se ha identificado ninguna queja por parte de ningún empleado de las empresas subcontratadas. Los horarios de trabajo están claramente sujetos a la regulación actual, así como el trabajo que se realiza los sábados está correctamente solicitado a las autoridades».
«No es justo, se aprovechan de que no somos nadie», comenta uno de los obreros sobre su situación en las obras del Camp Nou. «Claro, todos somos inmigrantes que no llevamos mucho tiempo aquí: no sabemos leer ni escribir, ni cómo funciona la ley. Por eso nos engañan y se aprovechan de nosotros», añade otro. «Me siento como un esclavo, que no tengo ningún derecho. Se aprovechan de tí y tu no puedes hacer nada porque necesitas el trabajo», continúan. «Es una explotación física y psíquica», comenta un obrero que fue despedido.
Se cumplen los requisitos
No obstante, tanto los obreros, como el club azulgrana y la propia constructora Limak confirman que se dan las condiciones y se cumplen con los requisitos de prevención en las obras. El casco y las gafas son imprescindibles, y también los arneses que utilizan los obreros que se encuentran en las alturas del Camp Nou. Por otro lado, la higiene está bien cuidada, donde los obreros cuentan con duchas, además de un comedor y fuentes de agua repartidas por todo el estadio.
Desde que dieron comienzo las obras de remodelación, han sido tres las actuaciones que se han llevado por sorpresa por parte de la Inspección de Trabajo y en todas ellas se han cumplido las condiciones mínimas de seguridad.
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